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cueva iniciática de Belén











Los trabajos e investigaciones de Rahn fueron excelentes, Rahn encontró los pasajes y túneles secretos donde supuestamente estaba el Santo Grial, exactamente una zona junto a Ornolac conocida como la cueva de Bethleém. El descubrimiento fue espectacular, consistía en un montón de galarías con runas, cruces, báculos y esquemas gravados en paredes. Curiosamente en un sector había un enorme bloque de piedra a modo de altar y pasillos con símbolos de la Lanza Longinos y el propio Santo Grial, incluso en una pared se encontraron gotas de sangre. A pesar de Otto Rahn haber dado con aquel patrimonio cultural de la Humanidad, realizar muchas fotografías y tomar dibujos; el Santo Grial no se hallaba allí, pues alguien se había adelantado, probablemente siglos atrás y lo había transportado a otro sitio.






Es en Ussat-les-Bains donde se encuentran las cuevas más espectaculares, como la de Belén o Bethléem en Ornolac, calificada como “gruta de iniciación”, con dos puertas de acceso: la de los hombres y la de Dios, un pentágono grabado en la roca
(una estrella de cinco puntas), corona el arco de entrada.
En el interior del citado pentágono se aprecia el grabado de un cráneo humano; a la izquierda un dragón que vomita fuego, y a la derecha, un delfín (mientras que el delfín puede ser una representación simbólica del Bien, el dragón puede referirse al Mal).



1 comentario:

  1. Anónimo19/8/15

    debe ser un viaje maravilloso, lleno de revelación trascendental y belleza natural. Así me fue en algo parecido del país vasco. Es un tesoro imperdible.

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