Montaillou que, en los siglos medievales, fue feudo del condado de Foix conserva en ruinas la torre de homenaje del castillo.
En el interior de sus muros se reunieron los perfectos de esta accidentada región pirenaica desafiando con ello a la iglesia católica.
Según la leyenda, por este lugar pasaron los cuatro fugitivos que lograron evadirse de Montségur portando en sus espaldas el Santo Grial, como tesoro cátaro.
Es lógico que estos perfectos buscaran el camino más angosto: los desfiladeros de la Frau o Gargantas del Terror, uno de los enclaves más escalofriantes de la mitología cátara, elevado a la categoría de camino sagrado.
En 1943, los nazis también se instalaron en esta enigmática región, siguiendo los rastros del tesoro cátaro.
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ResponderEliminar